Un minuto con Dios – Episodio 331 – Adolfo Pineda

Dios amado, en esta oportunidad de manera privada, vengo a pedirte por la vida de todas las viudas que se encuentran sufriendo la ausencia de su compañero, evidenciando una falta de protección, seguridad y estabilidad.

Alíviales este fuerte dolor que las debilita conduciéndolas a despertar sentimientos negativos de miedo y desesperación. Padre permite que ellas tengan el consuelo de familiares, amigos y allegados, que sus necesidades sean satisfechas mediante la oración continua.